sábado, 20 de diciembre de 2008

Se acerca la Navidad

Todos los años, para esta fecha, aparecen los vestigios de las más profundas melancolías por los que estuvieron y ya no están y por los que nunca estuvieron ni estarán.
Este año en particular, tuve todo el mes de diciembre para meditar sobre las cosas que me harían feliz en Navidad, sobre las personas que necesitaba volver a ver y sobre las cosas que me gustaría cambiar en esta nueva vida que pretendo empezar a vivir. Entre reencuentros, renuncias y proyectos, descubrí que la Navidad puede ser mucho más que melancolía si se aprende a perdonar y a pedir perdón, a escuchar y consolar, a compartir con los que amamos las pequeñas claves de la felicidad.
Que esta Navidad nos encuentre diferentes y capaces de brindar amor sin esperar nada a cambio...

Quiero, de Jorge Bucay